Con los titeres cualquier material adquiere vida propia
Algunas de mis creaciones
Desde 1976 he hecho más de 400 títeres y esculturas blandas
Para reir un poco
Mis creaciones siempre tienen un sello humorístico
Textiles que cobran vida
con hilo y aguja
Mis comienzos
Mi interés en la escultura blanda se remonta al año de 1976 cuando empecé a elaborar títeres y muñecos para el montaje de aparadores. Aunque desde niña siempre me fascinó diseñar y elaborar cosas, pues en vez de jugar a las muñecas, lo que me gustaba era hacerles ropa. Mi abuela materna, quien tuvo una gran influencia en mi vida me enseñó a pintar.
Mi formación ha sido básicamente autodidacta y desde siempre he estado en contacto con el mundo del diseño por mi ambiente familiar. Mi padre fue un arquitecto muy creativo y talentoso y mi madre también es artista. En un principio utilizaba el papel maché para mis muñecos, pero lo dejé cuando empecé a experimentar con la riqueza y posibilidades de expresión de los textiles para hacer mis esculturas.
La abuela ha sido mi acompañante favorita desde hace años. De alguna manera me identifico mucho con ella y me siento muy cómoda improvisando con ella. Aunque a veces ya no sabemos quién maneja a quién.
Nos divertimos mucho en los videos que grabamos con Iñigo mi hermano en la serie: "Divertimentos desde el encierro".